Encantado, él la seguirá hasta la puerta y,
después de entrar, se asomará a través del ojo de la cerradura por donde verá
únicamente oscuridad. Será más tarde cuando se enterará que los fantasmas suelen resplandecer. ©
Notícula: A falta de limón para la tinta invisible,
seleccionar con el botón izquierdo del ratón desde la la palabra "suelen".
Buenísimo truco el del zumo de limón.
ResponderBorrarResplandeciente ese diminuto mundo de los fantasmas el día de los difuntos.
Un abrazo.